Enfermedades de transmisión sexual y fertilidad femenina

• La importancia de un chequeo de rutina 
• Calma, la infertilidad por ETS se puede prevenir 
• ¿Cómo las ETS afectan la fertilidad? 
• Así ocurre la Enfermedad Pélvica Inflamatoria (EPI)
• ¿Cómo tratar la EPI?

Probablemente ya sepas que hacerte un chequeo y recibir tratamiento para las enfermedades de transmisión sexual (ETS) es una parte esencial del cuidado de tu salud y la salud de tu pareja. Pero si formar una familia está en tus planes del futuro, existe otra razón muy importante para mantenerte al día con tus exámenes de ETS: prevenir la infertilidad femenina.

Lo más importante que debes saber sobre la infertilidad causada por ETS no descubiertas y no tratadas es que: se puede prevenir y tratar. Las infecciones que pueden conducir a la infertilidad, como: la gonorrea y la clamidia, se encuentran entre las más comunes y tratables, por lo que las pruebas y el tratamiento pueden prevenir las complicaciones que pueden llegar a dañar los órganos reproductivos y dejar a una mujer infértil.

¿Cómo las ETS afectan la fertilidad? 

La clamidia y la gonorrea son infecciones bacterianas que se transmiten a través del contacto sexual que pueden afectar tanto a hombres como a mujeres y son algunas de las ETS más comunes que vemos los médicos, se estima que en los Estados Unidos se producen anualmente 2,86 millones de casos de clamidia y 820.000 casos de gonorrea. La mayoría de las veces, una mujer infectada no presenta síntomas, pero desafortunadamente, incluso una infección asintomática puede causar   Enfermedad Pévilca Inflamatoria. Los médicos estiman que hasta el 40% de las mujeres que contraen clamidia o gonorrea y no tratan adecuadamente la infección terminarán con EPI, y la CDC estima que hasta la mitad de los casos de EPI son causados ​​por infección por clamidia o gonorrea.

Así ocurre la EPI: cuando una mujer está infectada con una de estas ETS, los microorganismos pueden viajar hacia arriba, desde el cuello uterino o la vagina hasta los otros órganos reproductivos, provocando que también se infecten. La EPI, a su vez, puede causar tejido cicatricial en las trompas de Falopio que bloquea la vía del óvulo liberado por el ovario, lo que impide el embarazo natural y causa infertilidad de factor tubárico.

Incluso un episodio de EPI puede causar daños irreversibles a los órganos reproductivos, dejando infértiles al 12% de las mujeres. Las mujeres con antecedentes de Enfermedad Pélvica Inflamatoria deben estar más atentas a las pruebas de detección de ETS y los controles ginecológicos; los episodios múltiples aumentan significativamente el riesgo de infertilidad, con 3 episodios que elevan la tasa de infertilidad alrededor de un 50%. Es probable que las mujeres con infertilidad causada por EPI no puedan quedar embarazadas sin un tratamiento de fecundación in vitro, una técnica que extrae los óvulos directamente de los ovarios de la mujer, los fertiliza en un laboratorio y transfiere los embriones de regreso a su útero; La FIV puede superar la infertilidad relacionada con la EPI evitando las trompas de Falopio cicatrizadas.

La EPI se puede tratar con antibióticos, pero el tratamiento no puede revertir la cicatrización de los órganos reproductivos una vez que ya ha ocurrido, y son las cicatrices las que pueden causar infertilidad. De manera alarmante, la enfermedad inflamatoria pélvica puede presentarse con síntomas leves o ninguno (al igual que las ETS que puede causarla). Eso significa que la primera y mejor línea de defensa de las mujeres contra la EIP y la infertilidad prevenible, son las pruebas regulares de ETS y el tratamiento rápido.

Para las mujeres que quieren ser proactivas para proteger y preservar su salud reproductiva, la congelación de óvulos debe ser una consideración seria. La congelación de óvulos implica recuperar varios óvulos de los ovarios y congelarlos a temperaturas muy bajas  para evitar que envejezcan. Si congelas tus óvulos cuando eres joven y estás sana, efectivamente estás congelando el tiempo, lo que te permite usar tus óvulos jóvenes y saludables más adelante cuando te sientas lista para formar una familia. Las pruebas regulares y la atención preventiva, es la mejor manera de asegurarse de que puedes mantener abiertas todas sus opciones de fertilidad.

Conoce más sobre la congelación de óvulos y cómo puedes preservar tu fertilidad aquí.

Sabemos que las consultas por chequeo ginecológico y los análisis relacionados con tu salud sexual, pueden generarte mucha ansiedad, por eso, si necesitas aclarar tus dudas o conocer más sobre el proceso, recuerda que estamos aquí para ti. ¡Contáctanos! 233-2323.